El proyecto fue iniciado tras una encuesta en la que se descubrió que entre el 75% y 80% de la clientela son mujeres, y el 98% de los salones de belleza indican haber tenido clientas que sufren violencia doméstica / violencia de género. El objetivo es derivar a las mujeres que se encuentran esta situación a los servicios municipales especializados en el tema. Como perspectivas de futuro, los salones de belleza pretenden utilizar el espacio para atender otros temas que afectan en el bienestar de las mujeres, así como concienciar a la población y buscar soluciones para su erradicación.
La elección de este proyecto se debe a que nos resulta llamativo - y que pensamos que se debe impulsar - ya que es un espacio muy frecuentado por mujeres y que está al alcance de todas las personas, a la vez, que se da en un entorno muy normalizado y que facilita el acceso de estas mujeres a los servicios especializados para recibir la ayuda necesaria. Por otro lado, en cuánto al concepto de "violencia doméstica" que en España estaría mal usado ya que debería llamarse "violencia de género" queremos remarcar que tal vez sea porque incluyen la violencia hacia los hijos, y no sólo hacia la mujer, abarcando una problemática más amplia.
Mireia Calero, Ángela Jané, Andrea Madramany y María Pilar Muñoz
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